Demostrando que vale más la vida de un merideño que cualquier diatriba que distraiga, el gobernador Ramón Guevara llevó una vez más hasta la Sala Materna “Fidel Febres” de Ejido, en el municipio Campo Elías, la dotación de indumentaria de protección individual para el personal sanitario que allí presta su servicio.
Esta institución de salud, referencia en todo el estado, ha atendido más de 350 alumbramientos desde que se inició la cuarentena por la COVID-19, prestando atención no solo a mujeres residentes en el municipio Campo Elías, sino que los municipios panamericanos también refieren pacientes para que den a luz en este centro.
Los médicos, enfermeras y personal auxiliar se esmeran con vocación para prestar una óptima atención a cada gestante, allí no solo atienden partos y cesáreas, sino el proceso de gestación completa, que también es evaluado por los especialistas.
Luz para dar a luz
La crisis eléctrica también cobra consecuencias en este centro asistencial ubicado en la avenida Bolívar de la capital del municipio Campo Elías, sin embargo, su junta directiva ha pactado con la empresa eléctrica nacional para que los días lunes, miércoles y viernes eviten quitar la luz en horas de la mañana, dando oportunidad a que el equipo médico programe alumbramientos y cesáreas, situación que ha redundado en una atención mejorada para las embarazadas que se acercan para ser atendidas.
El combustible también merma la optimización del servicio; la falta de gasolina no solo impide el movimiento de las ambulancias para traslados regulares, sino que las plantas eléctricas que se usan son a gasolina, por lo que los interesados solicitan a los miembros de la mesa de combustible municipal que se aboquen a brindar una solución pertinente para el mejor funcionamiento del centro asistencial.
El personal trabaja en turnos de 24 horas y se preocupa por que las parturientas lleguen a término su gestación de manera satisfactoria.
El gobernador, al visitar los espacios, conoció a un bebé de escasos 30 minutos de nacido, hecho que llenó de animó al primer mandatario regional, que no solo se comprometió en el padrinazgo, sino que ofreció ocuparse de que esta sala materna siga siendo referencia de atención y vida en el estado. /NP