Las condiciones epidemiológicas y la realidad del sector educativo del país no están dadas para reiniciar las clases de forma semipresencial en octubre, tal como lo planteó el presidente Nicolás Maduro, de acuerdo a la opinión de especialistas.

«En este momento que estamos en pleno aumento del número de casos a mi me parece que es como riesgoso comenzar un régimen de clases semipresencial», opina la infectólogo, María Landaeta.

Por su parte la coordinadora nacional de la Coalición de Trabajadores Públicos por el Sector Educación, Griselda Sánchez, cree que “no hay condiciones en nuestras instituciones del país, hoy las escuelas en Venezuela tienen un alto deterioro en su planta física, no tenemos servicio de agua».

La representante del sector educación asegura que el debate sobre el inicio de actividades debería darse para enero, acompañado de mejoras salariales a los docentes y que el Estado garantice los equipos de bioseguridad a toda la comunidad educativa para protegerse del covid-19.

La doctora Landaeta enfatizó que Venezuela aún no registra un descenso en los casos diarios de la enfermedad, y que el regreso a clases podría ser un factor condicionante.

Alertó que el sistema sanitario del país no estaría en capacidad de absorber un nuevo incremento de casos” producto de la reactivación de las clases presenciales.

Posición del magisterio
“Más de 80 % de la población docente manifiesta no incorporarse. Van a asumir los despidos masivos, van a cuidar sus vidas, porque nuestros docentes también tienen familia. Si nos llaman, no vamos a ir”, expresó Sánchez.

Aseguró que asumirán las sanciones y lucharán para que se garantice la vida de toda la comunidad educativa, tanto en el sector público como en el privado.

Condiciones para un regreso seguro
De acuerdo con la infectólogo Landaeta, principalmente se debe garantizar el distanciamiento social, las medidas de higiene de manos y la sanitización de los espacios escolares.

Mientras que la docente Sánchez agrega que se debe comenzar por el tema de los salarios para que no se vayan los profesionales de la educación y velar por las medidas de bioseguridad garantizando los servicios básicos.

Todo esto, una vez que hayan bajado las cifras del impacto de la pandemia en el país./UR