El diplomático Elliot Abrams declaró al medio español ABC que de consumarse la extradición del colombiano Alex Saab, Estados Unidos lo someterá a un juicio justo e imparcial.
“Podrá defenderse de los graves cargos por los que es imputado. Tendrá todas las protecciones que le brinda la justicia estadounidense, un sistema, que como el de Cabo Verde es independiente”, aseguró Elliott Abrams al diario español ABC.
Para Elliott Abrams, juzgar a Alex Saab es un paso crucial para desmantelar la trama criminal de contrabando y narcotráfico que supervisa el régimen de Nicolás Maduro y el chavismo. Asimismo, afirmó que bajo el poder de Maduro “Venezuela se ha convertido en la sede de la corrupción mundial”.
El diplomático veterano mandó un mensaje a la comunidad internacional para que se sumen a la iniciativa de Estados Unidos contra los excesos del régimen. “Según Transparencia Internacional, Venezuela es uno de los cinco países más corruptos del mundo. La actual crisis es una gran prueba para la comunidad internacional. Creemos que la cooperación internacional, a través de una combinación de sanciones y diplomacia, puede lograr una restauración pacífica de la democracia. Así como la estabilidad económica y el estado de derecho”, aseguró Abrams.
Venezuela, junto con Nicaragua, es, de acuerdo con Transparencia Internacional, el país más corrupto de Latinoamérica. El informe publicado en enero señala que ambos países tienen características similares. Entre ellas: violaciones de los derechos humanos, represión de la oposición y carencia de servicios públicos básicos. Esa organización ha afirmado, de hecho, que el país está comenzando a ser un “estado fallido”.
El testaferro de Maduro
Luego del arresto de Saab, la fiscalía colombiana también presentó cargos contra el empresario, que tiene la doble nacionalidad de Colombia y Venezuela. Se le acusó de actividades irregulares vinculadas a los delitos de lavado de activos, enriquecimiento ilícito, exportaciones e importaciones ficticias y estafa agravada. Posteriormente, la policía colombiana registró y se incautó de varias casas y apartamentos de Saab en la localidad de Barranquilla.
Saab aseguró que no está vinculado a casos de corrupción que investiga EE UU
La defensa del baranquillero, entre los cuales destaca el juez Garzón, ha alegado que las autoridades de Cabo Verde han violado los derechos de su cliente. Abrams se manifestó al respecto y declaró que “la solicitud de extradición de Estados Unidos se basa en el estado de derecho. Así como en los compromisos comunes que Cabo Verde y el país han asumido para combatir el crimen organizado transnacional en virtud de tratados internacionales”, explicó.
Y añadió: “Lo que ha sido político es la agresiva campaña de mentiras y desinformación que Saab y el régimen de Maduro han montado en sus medios y en las redes sociales. Es un intento de influir en el proceso judicial e influir en la opinión pública caboverdiana. A pesar de esta presión política, tenemos fe y confianza en la integridad del sistema judicial de Cabo Verde y esperamos que se haga justicia”.
A Saab y sus abogados aun le quedan varios recursos antes de que la orden de extradición sea firme. De momento la estrategia de Garzón ha sido impugnar el proceso por considerarlo ilegal. Asimismo, ha acusado a Estados Unidos de persecución política. Pero según han dicho fuentes gubernamentales norteamericanas, Saab ya está intentando contratar a un abogado de Florida que le represente.
Saab se enfrenta a cargos de lavado de dinero, presentados el año pasado por la justicia estadounidense. Las autoridades también investigan su papel en alzamiento de bienes, tráfico de oro y crudo y fraude con la ayuda humanitaria.
Esta semana los propios abogados de Saab admitieron que el empresario, a quien el Gobierno estadounidense considera testaferro de Maduro, estaba repostando en Cabo Verde. En ese momento lo detuvieron por una orden de Interpol en una misión como enviado especial del régimen venezolano a Irán. Sus abogados alegaron que iría a negociar más adquisiciones de combustible./ABC