El Kremlin negó de manera terminante que Rusia intente desestabilizar Bielorrusia, donde este miércoles fueron detenidos 33 ciudadanos rusos, que según las autoridades de Minsk son mercenarios de la compañía militar privada rusa Wagner.
«Ya han aparecido calumnias acerca de que algunas organizaciones de Rusia envían a cierta gente para desestabilizar la situación en Bielorrusia. Por supuesto, no son más que calumnias», dijo en su rueda de prensa diaria el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov.
Subrayó que «Rusia y Bielorrusia son un estado unido, aliados y estrechos socios» y, por tanto, «no se puede ni hablar» de intentos de desestabilizar la situación en el vecino país.
«Desde luego, el incidente vinculado con la detención de los rusos debe ser aclarado», dijo Peskov, que añadió que de momento Moscú no cuenta con toda la información sobre los ocurrido.
El portavoz declaró que «por ahora» el presidente ruso, Vladímir Putin, no tiene planes para una conversación telefónica con su homólogo bielorruso, Alexandr Lukashenko, con objeto de abordar las detenciones./EFE